¿Cómo revisar los neumáticos para pasar la ITV?
La revisión ITV del coche comprende un análisis exhaustivo de los aspectos más esenciales que debe cumplir un vehículo para mantenerse en circulación sin representar un riesgo para el propietario, así como para el resto de los usuarios de las vías dentro y fuera de las ciudades.
En esa revisión, los neumáticos se encuentran entre los elementos más importantes y por esto se inspeccionan de manera minuciosa, convirtiéndose en motivo frecuente para reprobarla, de allí que se recomiende realizar una Pre-ITV, es decir, un chequeo preliminar en manos de expertos, garantizando de esta manera un proceso de revisión mucho más rápida y con la seguridad de aprobarla.
La temporada de verano es considerada como ideal para realizar una revisión de los neumáticos debido a los largos desplazamientos que se generan al encontrarse sometidos a las altas temperaturas, mientras que la superficie del pavimento también aportará gran parte del calor al cual se exponen los neumáticos.
Por lo tanto, es el momento de comprobar la presión de los neumáticos de tu vehículo, detectar irregularidades y también identificar los diferentes síntomas de desgaste que puedan determinar si se encuentran en buen estado.
En ALZIMOVIL, aprovechando el conocimiento de nuestro personal altamente calificado, preparamos este post donde resumimos los principales aspectos que se consideran al momento de revisar los neumáticos para pasar la ITV… porque siempre pensamos en nuestros clientes actuales y futuros.
PROFUNDIDAD DE LA BANDA DE RODADURA
Los neumáticos poseen una banda exterior de caucho que cubre la armadura del mismo, cuya función es garantizar el contacto seguro y cómodo con la superficie de rodamiento.
Esta banda es generalmente llamada “superficie de huella” y según su profundidad varía la tracción del vehículo, por esto se ha especificado en Ley una medida que no puede encontrarse por debajo de 1,6 mm de profundidad.
Luego de una serie de estudios técnicos, se encontró una relación con la moneda de Euro y esa profundidad requerida, convirtiéndose en un referente para realizar una revisión rápida del estado de los neumáticos.
Esta prueba consiste en colocar un euro en las ranuras que posee la banda de rodadura comprobando si se puede ver el aro dorado de la moneda. Los resultados indican que al verse este aro se ha producido un desgaste considerable en el neumático y debe cambiarse, mientas que si está cubierta por la goma todavía está en el rango de profundidad válida.
PRESIÓN DE LOS NEUMÁTICOS
Para revisar la presión de los neumáticos es necesario contar con un equipo manual para medirla.
En el mercado se encuentran diferentes modelos y marcas. Los digitales te darán indicaciones más o menos precisas, mientras que los analógicos son más confiables pero requieren cierto nivel de conocimiento en su manejo.
Además, para verificar la presión del neumático se debe realizar un el proceso de manera adecuada.
Primero compruebe que los neumáticos estén fríos.
Luego proceda a retirar el tapón de la válvula, presionando la cabeza del medidor de manera uniforme sobre el vástago de la válvula y después presionar de manera firme para detener el silbido.
Luego puede proceder a retirar el medidor y leer la presión, comparándola con la recomendada por el fabricante, aunque una referencia general sugiere alrededor de los 2,5 Bares.
CONDICIÓN Y EDAD DEL NEUMÁTICO
El tiempo influye en la condición del neumático, por eso desde el año 2000 se incluyó la semana y el año en el cual eran producidos los neumáticos, incluyéndolo en los últimos 4 dígitos del código de identificación del neumático, convirtiéndolo en un proceso sencillo porque solo consiste en observar y leer, no se confié porque aparentemente sus neumáticos parecen nuevos, revise estos dígitos al momento de comprarlos y en especial cuando programe acudir a la cita de la ITV.
Otro procedimiento rápido y sencillo que puede realizar antes de la ITV es observar la condición del neumático, fijándose en la banda de rodadura, flancos y hombros para identificar cortes, rasguños, protuberancias, así como otros signos de daño, al localizarlo le recomendamos llevarlo a un profesional para que examine la gravedad del mismo y lo asesore sobre el tratamiento adecuado.